¿Sabías qué?

 

Nuestra piel debe enfrentarse, a diario y de forma potencial, a 9 metales pesados, 4 gases reactivos y 400 g de polvo, que tanto el sebo como el maquillaje retienen por adhesión a la superficie de la epidermis, que se torna de este modo más vulnerable. De ahí que el desmaquillaje constituya el primer gesto de cualquier cuidado, siendo esencial para mantener la salud de nuestra piel. Su misión resulta fundamental: libera la piel de impurezas sin agredirla, preparándola para los tratamientos hidratantes.

 

El Consejo 

 

El desmaquillaje de tu piel es un gesto esencial que es necesario realizar a diario, mañana y noche, utilizando los cuidados adecuados para tu tipo de piel. Ante todo no debe ser agresivo. Las leches están, por lo general, mejor adaptadas a las pieles secas, aunque en caso de que prefieras un producto para aclararte con agua, elige una solución limpiadora suave con un pH neutro. Por último, no olvides volver a hidratarte y proteger tu piel con una crema o un bálsamo hidratante.

 

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